jueves, 16 de abril de 2009

Racismo en el Peru?

En Lima estudie en un colegio de clase media alta, quedaba en Chacarilla del Estanque, Surco. Mis compa;eros eran la mitad blancos y la otra mitad mestizos. A nosotros los mestizos nos llamaban "cholos" y ser "choleado" no era agradable en absoluto. La palabra venia con tanto desprecio que era equivalente a meterse con tu madre. Al principio no entendía muy bien la palabra, antes de estar en ese colegio estudie en otro donde todos eramos "cholos" y no había posibilidad para tal discriminación.

Los blancos entonces pasaron a ser en mi inconsciente de ni;o un ser diferente a mi. Tal diferencia era alimentada por la television, el cine y la sociedad entera que valoraba en esa época mas a un blanco que en gente con piel un poco tostada genéticamente y por el sol.

Me habían dicho que en NYC convivian todas las razas y culturas posibles. Pensaba que el racismo y la discriminación de cualquier tipo era cosa de países subdesarrollados. Me equivocaba, no solo existe discriminación y racismo sino que es peor que en Perú. Claro que acá el racismo no es blancos a "cholos" sino entre blancos y negros. Es tan fuerte y claro que hay zonas en NYC donde no entraría un blanco ni de broma. Recuerdo una vez haberme quedado dormido en el subway y haber ido hasta el ultimo paradero. Cuando desperté todo el vagón estaba llena de negros, baje del tren con miedo, trate de no demostrarlo. Cruce la calle y tome nuevamente el tren de regreso. No me parecía muy diferente a mi barrio salvo que todos eran negros salvo yo. En mi barrio en el Bronx , los latinos íbamos ganando terreno pero igual teníamos que bajar del subway y correr para no ser alcanzado por una pandilla de adolescentes negros que no les gusta que cruces su calle. Es su territorio, eso entiendo.

El racismo y discriminación se dan también desde los blancos hacia los negros. Recuerdo haber visto intervenciones policiales donde a los negros los tiraban al piso insultandolos solo por ser sospechosos. Luego al no encontrar nada los dejaban ir. Ser negro en Manhattan y vestir con ropa de basquet y zapatillas altas es ser sospechoso de robo o cualquier otro delito. Una vez hablaba con un par de estudiantes blancos a los que les lleve un delivery de comida. Ellos tenian un perro al que llamaban "nigga". Que es el equivalente a "cholo" en Perú aplicado para negros en USA.

En las calles de Harlem, se pueden apreciar fotos de principios de siglo XX, donde aparecen negros ahorcados por blancos. En esas mismas calles un anuncio de Adidas con un negro corriendo con sus zapatillas. Me basto ver esas fotos para entender por que tanto odio presente.

En NYC es neutral, en términos de discriminación, ser latino. Tanto negros como blancos nos ven como gente trabajadora, lo que no entienden es por que trabajamos tanto por un sueldo muchas veces menor al mínimo. Me siento orgulloso de ser como soy, de mi idioma, mi acento, mi historia y mi color. En NYC, ser latino esta bien, esta de moda.

lunes, 16 de febrero de 2009

Viva el Perú ,carajo!!!

Nunca he sido un fanático de las fiestas patrias, me gustaban esas fechas porque me daban vacaciones y una gratificación. Pero cuando se esta lejos uno se vuelve melancólico y más patriota que nunca. Asi que para las fiestas patrias decidi asistir a la Peruvian Parade en New Jersey. Hice un cambio con uno de mis cuates mexicanos para faltar a la chamba. Al principio él no queria pero le dije que iba a encontrarme con mis paisanos, me miró y me dijo así es al principio luego se te olvidará cuando son fiestas patrias.

Tomé el bus en el Port Authority. En el habían otros peruanos con sus polos de la selección peruana. Otros con polos donde una llama le escupe a un español. Todos iban bien animados. Me animé también. Bajamos en Union City, habia un pasacalle de danzas peruanas. Me animé aun más. Vi danzas negras,marinera, luego, y ahi me emocioné más, vi caporales. Había un bloque de caporales. Se me vinieron a mi mente las miles de veces que baile en Perú caporales. Se me vino a la mente Puno y su Candelaria, los Centralistas, Brisas, me emocioné bastante. Queria bailar con ellos.

Era la hora del almuerzo y muchos peruanos hacian cola en una cebicheria. Espero con ellos, ese día me sentía mas peruano que nunca. Que gusto me daba escuchar mis jergas en otras personas. Cuando entré al restaurante se sentía como en la cebicheria cerca a mi casa en La Victoria. Veía pasar las fuentes de cebiche y sudados, se me hacia agua la boca. Me pedí un cebiche, un chicharrón de calamar y una Cuzqueña. Por ese precio hubiera comido toda mi familia dos días en Lima. En fin , no importa, hoy día no importaba. Acabé,pagué, casi olvido dejar propina, salí para ver el pasacalle. Me dijeron que el pasacalle acaba en Patterson. Fui caminando con muchos otros peruanos. En el camino, las botellas de inca kola en el suelo me decian por donde ir.

Mientras mas me acercaba, mas me hacia recordar Lima. Las calles estaban llenas de banderas peruanas. Todos hablaban español. habian anticucheras en las calles. Llegué a una especie de estacionamiento donde habian stands de comida y artesanias peruana. En la noche se presentaria un grupo de musica que en mi vida habia escuchado. Habia que pagar 30 dolares para escucharlos. Én los parlantes se escuchaba salsa y la gente bailaba con su lata cuzqueña de 4 dolares en la mano. Yo comía mi choclo con bastante ají en una esquina con mi chela en lata. La música seguia sonando, temas de Hector Lavoe, la Sonora Ponceña, la Camaguey, Eva Ayllon, etc. Todos parecían estar felices. Más chelas, más música, más baile achorado.

Los parlantes eran de mala calidad y el sonido era de chirriante. Ya no podía escuchar a la gente. Tenía un six pack en mi cabeza. Ya no me sentía feliz ahi. Queria comprar otro six pack para escuchar menos y ver menos. Estaba lejos de casa. No importa. 24 dolares menos en mi bolsillo y más alcohol en mi cabeza. Me di cuenta que extrañaba Lima pero no todo. Odiaba estar en lugares asi en Lima. Otra vez la misma cancion de Eva Ayllon. Mejor me largo. En la salida me sellaron la mano por si regresaba. Me senté en la acera para terminar mi chela. Mis oidos me zumbaban. Del mismo lugar salían algunos borrachos que a las justas caminaban ayudados por sus compinches. Las calles estaban llenas de botellas y latas, tambien corontas de choclo y palitos de anticuchos.

Camine hacia el paradero del bus, en todos lados había fiesta, menos en mí. Ya en Manhattan me sentí más aliviado, lejos de todo el bullicio. Tome el subway a casa, la gente se alejaba, no podia evitar el aliento alcoholico.

Al otro día, en mi chamba , el cuate mexicano me pregunto que tal estuvo el día. Le conté que estuvo bien chevere, hubo danzas ,riquisima comida peruana, chicas hermosas , chelas a monton , pero el proximo año no voy a ir.

miércoles, 28 de enero de 2009

Malegria

"la malegria es esa dulce y a la vez amarga emoción que se tiene cuando la alegría y la melancolía se funden en una sola sensación, cuando todo parece ir bien, pero no cómo más nos gustaría. Es lo que sientes cuando la mujer a la que amas no está a tu lado, pero sabes que es feliz, o cuando un ser querido muere, pero no volverá a sufrir. Para nosotros no todo está bien, pero por mucho que queramos, no podría ir mejor. Ante eso, lo mejor es hacerse a la idea, resignarse".(Manu Chao)





Mis noches y días en NYC estan llenos de malegria. Es una constante lucha entre tristeza y alegria, recuerdos y vivencias, pasado y presente. Se vienen a mi mente las conversaciones interminables con amigos, los consejos de mamá, las largas caminatas por el centro de Lima, pero sobretodo los besos y abrazos de ella.



Había sido mi enamorada por años. Nos conocimos casi al entrar a la universidad. Nos gustamos casi de inmediato y empezamos a salir. Llevamos varios cursos juntos. Y sin darnos cuenta ya estabamos cada uno dentro de la vida del otro. Toda mi familia la queria. Tenía hasta su silla en la mesa de mi casa. Ahora ya esta con otra persona y feliz, eso creo. La distancia y otras cosas nos separaron.



Ella me apoyó para venir a NYC. Ella sabía que debia venir. Se alegró cuando me dieron la visa. incluso tomamos esa noche. Nos fuimos al bar Queirolo de Quilca. Nos tomamos una res(para los que no tienen cultura etilica, es una mezcla de pisco quebranta con Ginger Ale). Nada mejor que una res y la mujer que amas para ser feliz esa noche. Ya picados nos fuimos a mi casa e hicimos el amor. Nos miramos y lloramos juntos. Al despertar sentí su mano agarrandome fuerte, habia llorado toda la noche en mi pecho. Esa noche la recuerdo como si fuera ayer. Ambos nos dijimos cosas, las tipicas cosas que se dicen.



Apenas llegué a NYC la llamé, conversamos hasta que se me acabó la tarjeta. Y llamé todos los dias durante la primera semana. Luego por alguna razon deje de hacerlo tan seguido. No sé si por plata o porque trabajaba bastante o porque ya no había mucho que conversar...no lo sé. Mi mama me dijo que la invitaban a comer. Al principio iba, luego dejo de ir. Ella recordaba mejor que yo los cumpleaños de mi familia y era la primera en llamarlos. Lo hizo algun tiempo,luego ya no.



Al cabo de un tiempo, ella cambio de número, consiguió un buen empleo, se mudó a su propio departamento(por fin dejó de vivir con sus padres), y se enamoró varias veces, es lo que he escuchado. Ya casi no se nada de ella. No se si a ella le pasa lo mismo que a mi. No se si algun dia estaremos juntos como aquella noche nos prometimos. Lo que se es que ahora ninguno de los dos es el mismo.